La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha actualizado la autoevaluación de sus previsiones macroeconómicas y fiscales que publicó por primera vez en febrero de 2022. Este ejercicio de transparencia, en línea con los valores fundamentales de la AIReF, sitúa a la AIReF a la altura de otras Instituciones Fiscales Independientes (IFIs) que ya realizan este tipo de ejercicios y da respuesta a una de las recomendaciones que hizo la OCDE a la AIReF y al Plan Estratégico de la AIReF 2020-2026.
Del análisis se deduce que la economía española mantuvo cierta resistencia en 2022, que se refleja en una estimación de crecimiento del PIB que resultó superior a lo previsto en primavera de ese año por la AIReF. Este resultado se extiende a los principales agregados de la demanda. En el ámbito presupuestario y en comparación con otras instituciones, las previsiones del déficit realizadas por la AIReF presentaron una mayor precisión en promedio tanto en 2021 como en 2022.
Tomando como referencia el período 2016-2022 se aprecia que, en general, las características de las previsiones de la AIReF, de acuerdo con los estadísticos empleados habitualmente para analizar la calidad de las previsiones, son satisfactorias. En el ámbito presupuestario, el análisis no identifica sesgos relevantes en las previsiones fiscales de la AIReF a lo largo del periodo 2016-2022.
La AIReF señala que sus previsiones resultaron, en promedio, más precisas que las del Gobierno. Indica que, en momentos puntuales, las del Gobierno resultaron más acertadas, pero en general, para todos los horizontes temporales analizados, las previsiones de la AIReF fueron más acertadas y equilibradas. En concreto, resultaron, en promedio, dos décimas más precisas y con alternancia de desviaciones optimistas y pesimistas, de lo que se desprende ausencia de sesgos relevantes. Incluso en el año 2021, ejercicio en el que las previsiones de la AIReF presentaron las mayores desviaciones, resultaron cuatro décimas más precisas que las del Gobierno.
La AIReF se compromete a continuar trabajando en mejorar las debilidades detectadas en la estimación de determinadas rúbricas. Tal y como explica la institución en el documento, las previsiones, por su propia naturaleza, están sujetas en circunstancias normales a una elevada incertidumbre, que se ha acentuado de manera extraordinaria en los años recientes como consecuencia de la pandemia y del estallido de la guerra de Ucrania y de otras tensiones geopolíticas. En este contexto tan cambiante, el análisis de los errores de previsión se hace si cabe más relevante.