En los Informes, la AIReF mejora las previsiones de déficit para 2022 de siete CCAA y empeora las de otras siete. Gran parte de las variaciones individuales se derivan, en sentido negativo, del registro de los REACT – EU y el gasto trasladado de las ayudas a empresas y, en menor medida, del aplazamiento al ejercicio siguiente del impuesto estatal sobre residuos. En sentido positivo, las previsiones se han visto afectadas por el cierre de 2021 y, con efecto limitado, el impacto estimado de la inflación actual, que se espera este año más acentuado en ingresos que en gastos.
En concreto, mejoran las previsiones para Aragón, Asturias, Illes Balears, Cantabria, Navarra, País Vasco y La Rioja. Por el contrario, empeoran las perspectivas en Canarias, Castilla y León, Galicia, Andalucía, Cataluña, Murcia y la Comunitat Valenciana, previendo déficits superiores a la referencia fijada en estas cuatro últimas. Por último, se mantienen las previsiones para Castilla-La Mancha, Extremadura y Madrid.
La AIReF publicó también el 7 de abril el Informe Complementario de Evaluación Individual de los Presupuestos para 2022 de las Corporaciones Locales, en el que se realiza el análisis individual de las 24 grandes entidades locales (EE.LL.) que, por el tamaño de sus presupuestos, competencias, estructuras organizativas y población afectada, influyen de manera decisiva en el resultado del subsector.
Para el conjunto del subsector, la AIReF estima que en 2022 las CCLL mantendrán el superávit de 0,3% del PIB alcanzado en 2021. Los datos comunicados presentan importantes variaciones respecto de los remitidos en el Informe anterior, especialmente en los ayuntamientos de Barcelona, Las Palmas de Gran Canaria y Alicante, cuyas previsiones cambian de obtención de superávit a déficit.
Con estos nuevos datos, prevén déficit en 2022 los ayuntamientos de Barcelona, Palma, Las Palmas de Gran Canaria, Bilbao, Alicante, Valladolid y las tres Diputaciones Forales del País Vasco (DD.FF.)La AIREF prevé que solo los ayuntamientos de Barcelona, Bilbao y Valladolid incurrirán en déficit al estimar un menor grado de ejecución del gasto, coherente con lo verificado en los últimos años.
